Aunque hablamos de dolor, también tenemos que decir que va a ser muy diferente en cada persona, ya que lo que a muchas nos duele, otras ni se enteran. Si eres de las personas que se atreven con todo, seguro que soportas también el dolor en estas zonas que vamos a comentar.
Tanto el tobillo como el pie son dos de las zonas más dolorosas, porque claramente nos encontramos con una parte del cuerpo que no dispone de apenas grasa y por ello, al ser más hueso, el dolor será más intenso. Para no pasar el peor trago de tu vida, lo mejor que es comiences con un tatuaje en otra zona y que poco a poco, te vayas atreviendo a ésta.
Es una zona muy sensible, al igual que la palma de la mano y aunque no son muy frecuentes los tatuajes aquí, nosotros hemos querido mencionarlos porque sí son zonas bastante dolorosas para hacerse un tatuaje.
Las costillas son otra de las zonas, que como hemos comentado antes, tienen menos grasa y más hueso, por lo que una vez más, el dolor será tan intenso como en los ejemplos anteriores. Lo mismo ocurre con la zona del pecho, sobre todo si eres una persona muy delgada.
Sin duda, es uno de los lugares más de moda a la hora de elegir nuestro tatuaje pero también es doloroso, ya que es una zona delgada y con poca carne que lo proteja, al igual que detrás de las orejas, por sus terminaciones una vez más, por la fina piel que tienen.
Si ya de por sí, nos puede doler depilarnos las axilas imáginate hacer un tatuaje. Pues sí, es una de las zonas más delicadas de nuestro cuerpo y aunque puede que no sea una de las zonas más elegidas debemos de saber el por qué. Algo similar ocurre en la zona de los genitales, si es que muchas veces es mejor elegir otro lugar donde no sufrir tanto o quizás, decantarnos por diseños que se puedan acoplar a cualquier zona de nuesto cuerpo.
Para finalizar, vuelvo a recalcar que sin duda, todo va a depender de la persona y de su sensibilidad ante el dolor. Sin duda, tampoco podemos negar que no duele nada, pero sí puede hacerlo en menor medida.